El día de hoy hablaremos de una de las frutas favoritas de todos nosotros; la fresa, rica en color y sabor, se ha convertido en un alimento idóneo para cualquier hora del día. De hecho, además de ser un alimento rico también es muy nutritiva por sus grandes aportes a una buena salud.

La fresa es un alimento que resalta, un gran acompañante a cualquier hora del día, ya sea en ensaladas, jugos o postres, posee un gran conjunto de vitaminas y minerales. A su vez, la fresa tiene un gran efecto antioxidante y es el alimento perfecto para las personas que sufren de hipertensión.

Las fresas son poco calóricos. Tienen un valor energético de entre 27 y 34 kilocalorías por cada 100 gramos. Están compuestas principalmente por agua e hidratos de carbono mientras que tienen un bajo porcentaje de proteínas. ¡Eso sí! Es una excelente fuente de vitamina C.

Beneficios del consumo de fresas

• Son bajas en calorías, y contienen fibra, que ayuda a regular los procesos digestivos y a reducir la sensación de hambre.
• Ayudan a disminuir el nivel de colesterol malo en sangre, gracias a la gran cantidad de ácido ascórbico, lecitina y pectina que contiene el fruto.
• Son una fuente de vitaminas del grupo B, como la vitamina B6, la niacina, la riboflavina, el ácido pantoténico o el ácido fólico.
• Actúa como un potente antioxidante y antiinflamatorio natural. Una taza de fresas contiene 21 gramos de manganeso.
• Contribuyen a la salud ósea, gracias a su alto contenido en magnesio, potasio y vitamina K.
• Potencian la salud ocular, estudios han señalado que las fresas mejoran la salud de los ojos al disminuir el riesgo de degeneración macular.
• Ayudan a perder peso, por su bajo contenido calórico y su alto contenido en nitrato. Las fresas son un buen aliado para las dietas de pérdida de peso. Ayudan a reducir el apetito, favorecen la circulación sanguínea y, además, ¡son deliciosas!

Recuerda que es muy importante, lavarlas muy bien, se recomienda el uso de una escobilla pequeña y frotar las fresas, una por una.